Cartas a Quito / 27 de noviembre de 2024

Comparaciones idiotas

He leído con estupor que una persona adicta a un sector político ha lanzado una verdadera idiotez como comparación de situaciones. Ha dicho, en redes sociales, muy suelto de huesos, como respuesta a declaraciones del ministro de Gobierno sobre la suspensión de un servicio público (internet) es penado por la Ley, que entonces se debería penar la suspensión del servicio de energía eléctrica.

 Francamente, nunca llegué a imaginar, siquiera, que la rigidez mental, generada en el dogmatismo, llegara a tal nivel. Este señor, en su poca capacidad de razonamiento, no admite el concepto de fuerza mayor, y, es incapaz de poner el mismo razonamiento en lo que está ocurriendo con los racionamientos de agua que ha tenido que implementar el Municipio de Quito.

Creo que es completamente idiota considerar como un delito tanto los racionamientos de agua potable, como los racionamientos de energía en una época como la que estamos enfrentando. Pero bueno, ya sabemos que el fanatismo y el dogmatismo funcionan así. Por eso es importante que la educación sea tal que enseñe a razonar, no como actualmente, que en la mayor parte de planteles, especialmente fiscales, se prioriza la memoria y no el razonamiento.

Los que formaron su cerebro con los principios memoristas, son la presa más fácil para el dogmatismo y el fanatismo. Esto, obviamente, les conviene a aquellos partidos políticos que basan sus adhesiones en fidelidades obtusas y sumisas. La verdadera lucha la debemos enfocar en erradicar ese tipo de educación, impuesta por un partido político que domina gran parte de los planteles fiscales.

 José M. Jalil Haas