Izquierdas nefastas

El gobierno derechista de Grecia acaba de aumentar a 72 horas y 6 días por semana la jornada laboral, cuando en el mundo es 40 horas. El trabajadortambién puede aceptar un segundo empleo de máximo 5h, lo que significa que puede trabajar 13 horas al día. Es decir, la explotación al extremo, como en la época monárquica o la esclavista.

Todo esto viene después del estrepitoso fracaso del gobierno de izquierdas de Syriza. La derecha griega consiguió ganar argumentando su ineficiencia. Este,un solo ejemplo, de lo que ha pasado con la izquierda en el poder. Cuando no han gobernado han logrado una serie de cambios, pero cuando han estado en el poder con sus desastrosas acciones le han dado argumentos a la extrema derecha para entronizarse y revertir muchos logros.

Pero ahora la situación es aún más compleja, ya que ha aparecido una autollamada izquierda progresista, que dice defender a los pobres, pero esto no es más que un medio o un mecanismo para hacerse del poder. Ante el vacío dejado por la izquierda tradicional, esta izquierda progresista aprovecha para pescar en aguas revueltas. 

Pero eso no es todo, se han dado cuenta que asaltar el poder del estado es la posibilidad de asaltar las arcas públicas, bajo el argumento de que deben protegerse de la persecución de la derecha o tener fondos suficientes para enfrentar la propaganda de la derecha.

Se han convertido en un cartel, igual que los grupos guerrilleros que extorsionan para conseguir fondos, y ahora utilizan la forma de partido para hacer lo mismo. La política convertida en un negocio, todo en nombre del pueblo, de sus necesidades, de sus sueños.

Pero lo más grave, es la izquierda dictatorial como la de Ortega, Maduro, Diaz-Canel. Y eso pretenden Morales, Correa. Si Luisa González gana el Ecuador seguiría ese rumbo.

Esto no quiere decir que apostemos por la derecha, al contrario, derecha e izquierda son caras de la misma moneda.  Es hora de rebasar este showpolítico y generar algo muy diferente.