I.- La votación: A la final, el correísmo no pudo alzarse con la cabeza – como señal de triunfo con sabor a venganza – de la Ministra del Interior M. Palencia, toda vez que no logró conseguir los 92 votos, contando solo con 77 a favor de la censura, votos compuestos por RC5 y PSC, dándose 40 votos en contra de la censura y 16 abstenciones principalmente atribuibles a Construye, los mismos que fueron los decisivos, y que, según el interpelante L. Berrezueta (RC5) y de G. Celi, presidente de SUMA, tienda que auspicia la candidatura de J. Topic, serían probablemente suerte de un acuerdo a cambio de la aprobación por parte del TCE de la lista de asambleístas de Construye.
II.- Un atormentado correísmo que va de mal en peor: Lo cierto es que, esta nueva derrota del devaluado correísmo, se suma a una larga lista de fracasos y golpes, tales como, los fallidos juicios a la Fiscal y a la Canciller; un binomio presidencial débil y no puntero por primera vez; la declaración como no elegibles para ingresar a Estados Unidos de sus cabecillas y por ende – como ya lo hemos anotado – el derrumbamiento de la teoría del Lawfare; el encarcelamiento de Glas y el debilitamiento del apoyo al “asalto” a la embajada mexicana y del asilo (tema que por cierto, siendo una de las iniciales causales principales del juicio político en contra de Palencia, fue al final del día hábilmente no utilizado por el correísmo, toda vez que dadas las circunstancias, esas iniciales armas resultaban a la fecha contraproducente políticamente); el espaldarazo a las forzadas “elecciones” del 28 de julio al dictador Maduro; los pronunciamientos inconsistentes de su candidata L. González en cuanto, entre otros, a fuentes de energía limpias ajenas a las fuentes hídricas, y un largo etc.; todo lo cual, cabe indicarse, no les resta apoyo del voto duro del que disponen, pero sí les alejaría del voto dubitativo.
La interpelante, P. Cabezas, había expresado poco tiempo atrás que, si el juicio político no resultaba favorable a sus intereses, ella se iría a su casa. ¿Será que cumple su palabra?, al decir de las cuestionables prácticas utilizadas en el juicio, lo más probable es que, consistente con aquello, no la cumpla.
III.- Una defensa implacable: La ministra se defendió, en su conjunto, muy bien, de manera ordenada, específica y firme, no dando posibilidades de réplica a los interpelantes, los mismos que fueron apaleados por la contundencia de los argumentos de la ministra, la misma que salió bien librada de la censura, quien merecía salir inmune – pese a tener mucho trabajo aún por realizar en el campo de la seguridad – entre otros motivos, independientemente del interesado apoyo o no de Construye, por la solidez argumentativa frente a la debilidad intelectual de sus interpelantes.
Cabe indicarse que, el día del juicio, no se dio paso a la reconsideración de la votación, la cual aún estaría latente, pese a que en la práctica y como van las cosas, siendo no imposible, es poco probable que reviva el intento de censura en su contra vía reconsideración de la votación, caso en el cual, Construye tendría la última palabra…
Conclusión: Para el oficialismo, apagado por las circunstancias atmosféricas y por sus consecuencias en las encuestas, lo dado es una luz de alegría alzándose con la copa de la victoria al no darse la censura en contra de su más representativa ministra, entre otros motivos, por su cercanía con Noboa; y, por otro lado, quien Perdió el Juicio, fue sin duda el desorientado correísmo, no solamente por sus resultados prácticos en el campo político, sino por el peculiar carácter y conducta de su líder.